La intención de Bimbo es clara: quieren cerrar su fábrica en Valladolid capital el 31 de diciembre de este mismo año. Así se lo han trasladado a sus trabajadores en la primera reunión que han mantenido con el Comité de Empresa. También, representantes de esta compañía aseguraron que les gustaría desmantelar la planta el 28 de febrero de 2025.
Bimbo justifica esta decisión con cuestiones "organizativas" y para "mejorar la eficiencia" de su producción. Según los propios trabajadores, todo apunta al que destino final será alguna de las fábricas ubicadas en Cataluña.
Los sindicatos se oponen radicalmente a esta medida e insisten en la viabilidad de la planta ubicada en el Polígono de San Cristóbal. Asimismo, y ante la posibilidad de un ERE, no descartan convocar una huelga y reunirse con el SERLA. Todo con la intención de impedir que 166 trabajadores directos y otros 40 subcontratados pierdan su empleo.
De momento, las partes se han emplazado para otra nueva reunión de la comisión, tras el encuentro celebrado en un hotel de Valladolid, que tendrá el 2 o 3 de octubre.