El patrimonio como motor turístico y económico
En el marco de la Feria de Valladolid, Alfonso Fernández Mañueco, presidente de la Junta de Castilla y León, inauguró las ferias Intur y AR-PA Turismo Cultural, dos eventos de relevancia nacional que este año se celebran de manera conjunta. Según ha destacado, esta unión simboliza cómo el “inmenso patrimonio” de la región es el pilar de su amplia oferta turística, generando riqueza y empleo tanto en zonas urbanas como rurales.
En octubre de 2024, el sector turístico regional alcanzó un récord histórico con 78.000 personas empleadas, según cifras compartidas por Mañueco. Además, Castilla y León recibió ocho millones de viajeros en los primeros diez meses del año, un aumento del 4,4 % respecto al mismo período en 2023. También se evidenció un crecimiento del 10 % en el número de turistas extranjeros y pernoctaciones entre enero y septiembre.
Referente en turismo de interior
El presidente resaltó que Castilla y León lideró el turismo rural en España durante el periodo mencionado, recibiendo el 17 % de los viajeros. Este crecimiento sostenido, argumentó, refleja un cambio estructural en el sector turístico de la región, fruto del esfuerzo conjunto de empresas, profesionales y el respaldo del Gobierno autonómico.
Tres pilares del turismo regional
Mañueco destacó tres bases clave para el desarrollo del turismo en la comunidad:
- El patrimonio cultural y arquitectónico, con 14 lugares Patrimonio Mundial, 130 conjuntos históricos y más de 2.600 Bienes de Interés Cultural.
- La riqueza natural, representada por 33 espacios protegidos.
- La enogastronomía, sustentada en productos agroalimentarios de calidad y las 9 Rutas del Vino, que atrajeron al 20 % de los enoturistas nacionales en 2024.
Evento internacional en 2025
Mañueco anunció que en 2025 se celebrará un gran evento internacional sobre gastronomía, organizado en colaboración con la Confederación Regional de Hostelería de Castilla y León. Este encuentro buscará fortalecer la posición de la comunidad como referente en turismo cultural y gastronómico.
Finalmente, Fernández Mañueco hizo un llamado a la colaboración entre administraciones, instituciones y el sector privado, para convertir el turismo cultural y patrimonial en un motor de desarrollo económico, creación de empleo y cohesión territorial.