
El Grupo Municipal Socialista denuncia lo que considera como una pésima gestión del servicio municipal de autobuses por parte del equipo de gobierno. A pesar de que el concejal de Movilidad,
Carlos Fernández, calificó la manifestación del pasado viernes como absurda y aseguró que se han dado soluciones a todos los problemas, "la realidad demuestra que el transporte público sigue generando un gran malestar entre los usuarios", afirma el partido socialista.
José Antonio Cartón, responsable del servicio en el mandato anterior ha señalado: "Tan solucionados estaban que casualmente el mismo día de la protesta el Ayuntamiento anunció una serie de mejoras en el servicio de autobuses. Eso sí, lejos de corregir el verdadero problema —la falta de frecuencias y la incertidumbre sobre los horarios—, ha optado por su táctica habitual: añadir unas cuantas paradas aquí y allá y esperar que la gente deje de protestar. El equipo de Morala no aciertan ni cuando rectifica, ya que el problema real del transporte municipal no se soluciona con añadir una o dos paradas en determinadas líneas, sino con una planificación adecuada de las frecuencias. El mayor problema de los usuarios del autobús municipal sigue siendo la incertidumbre sobre los horarios, ya que nadie sabe con exactitud cuándo pasará su autobús".
José Antonio Cartón denuncia que el aumento de 20 minutos en todas las líneas, sin considerar las diferencias en kilómetros y trayectos, ha provocado situaciones absurdas, como la acumulación de hasta tres autobuses en la misma parada con destino al mismo lugar, como pasa por ejemplo en la Avenida de Galicia en dirección al Hospital, donde los vehículos se acumulan en lugar de distribuirse de manera eficiente. Uno de los cambios es la recuperación del servicio directo al Hospital desde Santo Tomás de las Ollas en la Línea 6, un trayecto que había sido retirado en el 2021 y que ahora se restablece.
"Desde el Psoe nos vuelve a llamar la atención las coincidencias entre los servicios y los colores de quien gobierna, ya que hasta ahora era posible realizar el trayecto con un simple transbordo en el intercambiador. La única explicación lógica es que la nueva planificación de frecuencias ha hecho imposible la conexión con otros autobuses, dejando a muchos usuarios sin alternativa y obligando al Ayuntamiento a improvisar parches en el servicio. Exigimos al equipo de gobierno que escuche de una vez por todas a los ciudadanos y restablezca las frecuencias que siempre han existido, aplicando criterios de eficiencia y utilidad real. No se trata de añadir paradas de forma arbitraria ni de hacer cambios improvisados para acallar las críticas. Se trata de ofrecer un servicio de transporte público que realmente funcione y que sea una alternativa viable para los vecinos de Ponferrada".