El déficit de personal enfermero y su impacto en la calidad asistencial
La situación de la enfermería en Castilla y León muestra un claro déficit de personal que compromete la calidad de la asistencia sanitaria. Según el informe presentado por la Organización Colegial de Enfermería de Castilla y León, nuestra comunidad necesita unos 5.000 enfermeros adicionales para cumplir con los ratios recomendados por organismos internacionales como la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) y la OMS (Organización Mundial de la Salud). Actualmente, Castilla y León cuenta con un ratio de 735 enfermeros por cada 1.000 habitantes, cifra que se encuentra por debajo de la media europea de 883 profesionales.
Castilla y León cuenta actualmente con 17.572 profesionales en el sector, de los cuales más de 3.600 se jubilarán en los próximos 10 años, según el informe.
Formación insuficiente y falta de incentivos
En el ámbito formativo, se señala una clara insuficiencia en el número de plazas ofertadas en las universidades públicas, que mantienen cifras de admisión similares a años anteriores. De los 953 nuevos egresados en 2023, gran parte ha optado por completar sus estudios en universidades privadas, que han incrementado sus plazas en los últimos cinco años. Sin embargo, la demanda sigue siendo muy superior a la oferta, con estudiantes triplicando las plazas disponibles, según informaciones recogidas.
La falta de incentivos y la escasez de contratos estables también contribuyen a la fuga de talento hacia otras comunidades y países, como Noruega y Reino Unido. En Castilla y León, se estima que el 3,57% de los graduados en enfermería migran a otras comunidades, lo que convierte a esta región en la segunda en tasa de emigración profesional, solo por detrás de Islas Baleares.
Recomendaciones del Consejo Autonómico de Enfermería
Para enfrentar este escenario, el Consejo sugiere la implementación de un plan que incremente la contratación y fidelización de enfermeros en zonas de difícil cobertura, especialmente en áreas rurales donde el acceso a los servicios de salud es limitado. Igualmente, se propone la creación de puestos específicos en atención primaria que permitan a los enfermeros asumir competencias extendidas y optimizar el tiempo de atención de los médicos.