
El hasta ahora obispo de Astorga, Jesús Fernández, ha sido nombrado nuevo obispo de Córdoba por el papa Francisco, según confirmó este jueves la Nunciatura Apostólica. El prelado leonés sustituirá en el cargo a Demetrio Fernández, quien ha estado al frente de la diócesis cordobesa desde 2010.
Jesús Fernández nació en Selga de Ordás (León) el 15 de septiembre de 1955 y fue ordenado sacerdote en 1980. Doctor en Filosofía por la Universidad Pontificia de Salamanca, ha desarrollado su labor episcopal en distintas diócesis: en el 2013 fue designado obispo auxiliar de Santiago de Compostela y desde el 2020 ha ejercido como obispo de Astorga.
En su comparecencia tras hacerse público el nombramiento, Fernández expresó su gratitud al pontífice por la nueva misión que se le encomienda: “El haber ejercido en dos diócesis distintas, Santiago y Astorga, reafirma en mí la condición de que soy un peregrino hacia la tierra prometida, la santidad y el reino de Dios”.
El obispo tomará posesión de su nuevo destino el 24 de mayo y reconoció que deja Astorga con sentimientos encontrados. “El Señor, por medio de la Iglesia, me pide dejar esta comunidad eclesial. Lo hago desde la disponibilidad y obediencia al papa Francisco y sin ocultar el desgarro interior que supone para mí dar este paso”, confesó.
Durante su etapa en Astorga, Fernández impulsó diversos proyectos, como la renovación pastoral con la creación de las Unidades Pastorales, los Centros de Escucha del Duelo o la Mesa del Mundo Rural, destinada a integrar a familias inmigrantes en la comunidad cristiana. Además, destacó la importancia de seguir protegiendo el patrimonio histórico y cultural de la diócesis.
Con su salida, se abre ahora el proceso para la designación de un nuevo obispo en Astorga. La Maragatería, El Bierzo, buena parte de Valdeorras y O Bolo se quedan sin obispo hasta la designación de uno nuevo.