ICAL | Nacho Valverde  Foto de Archivo de las clases de conducción de la autoescuela Lisardo, en Segovia
ICAL | Nacho Valverde Foto de Archivo de las clases de conducción de la autoescuela Lisardo, en Segovia

En Valladolid, las autoescuelas alertan de un problema que parece no tener una solución inmediata. José Luis Matos, Presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Autoescuelas, ha señalado la grave situación que atraviesan debido a la escasez de examinadores.  

Ha revelado que actualmente hay una lista de espera de 2.834 aspirantes, incluyendo 131 para permisos de camión, autobús y tráiler, y 191 para permisos de motocicleta. La espera para poder presentarse a un examen es de aproximadamente dos meses, una demora que puede tener consecuencias significativas para aquellos que necesitan su licencia para obtener empleo o para aquellos que están bajo plazos para recibir subvenciones.

Matos ha explicado que la falta de examinadores durante el verano, combinada con el alto volumen de solicitudes, ha exacerbado el problema este año. Aunque ha sugerido que la solución ideal sería aumentar el número de examinadores o asegurar que se dediquen exclusivamente a la realización de exámenes, reconoce que esto escapa del control de la asociación y depende de las decisiones de la Jefatura de Tráfico. 

 Además, ha mencionado el caso particular de conductores extranjeros que dependen de la obtención de su permiso para mantener su estatus de residencia y trabajo, lo que añade una capa adicional de urgencia al asunto. Este problema, según Matos, no es nuevo y varía en intensidad de una provincia a otra, pero ha enfatizado que es crucial que se tomen medidas para acortar las listas de espera y facilitar el proceso para los aspirantes y las empresas afectadas.

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