
David Maroto, acusado de asesinar a su pareja, Paloma P., y a la hija de esta, India, de 8 años, pidió perdón a las familias de las víctimas durante la cuarta jornada del juicio celebrado en la Audiencia de Valladolid. En su declaración final, afirmó que actuó de forma inconsciente por los efectos de una droga que, según él, le había proporcionado un amigo.
El fiscal y el resto de acusaciones han rechazado esta versión, manteniendo que las muertes fueron planificadas y ejecutadas con alevosía. Consideran probado que Paloma e India no tuvieron posibilidad de defenderse, calificando los hechos como un doble asesinato con agravantes de género y parentesco. En consecuencia, mantienen sus solicitudes de 25 años de prisión por el asesinato de Paloma, y prisión permanente revisable por el de la pequeña. Además, subrayaron la brutalidad del acusado.
Maroto niega ser consciente
La defensa, por su parte, argumentó que se trató de homicidios cometidos bajo los efectos del alcohol y las drogas, por lo que solicitó una pena menor de 25 años en total. Según su abogado, Maroto sufrió una enajenación mental en el momento de los hechos, algo que no ha sido respaldado por las pruebas presentadas. Las acusaciones desestimaron estas alegaciones, insistiendo en que Maroto estaba plenamente consciente del daño causado.
El juicio, que ha generado gran impacto en Valladolid, concluye esta semana con la deliberación del jurado. Será este grupo quien determine la culpabilidad del acusado y si concurren las agravantes planteadas, lo que podría significar la confirmación de la pena máxima solicitada.