
Decenas de localidades de Castilla y León se manifiestan frente a la sede parlamentaria autonómica para protestar contra las macrogranjas y plantas de biogás. Denuncian la falta de control y planificación en estas instalaciones.
Los representantes de la plataforma ciudadana convocante “STOP macrogranjas, STOP plantas de biogas” desmienten que estas plantas generen empleo, asegurando que una instalación de 50.000 toneladas apenas necesita seis trabajadores.
Ruperto Sánchez, coordinador de la plataforma, indica que la “automatización” y la falta de “supervisión” a largo plazo son las principales preocupaciones de los vecinos, que exigen “estudios” de impacto poblacional además de los medioambientales.